lunes, 28 de noviembre de 2011

#14

Marta se despierta, las gafas de sol se la han terminado cayendo.
- ¡Yo!¡yo!, ¡me lo pido yo!- Empieza a gritar Paula.
Y de repente suena desde el megáfono:
- Atención, vayan desalojando las piscinas, gracias.
María se la ha adelantado.
Paula y Marta me acompañan a mi casa. La verdad es que ni nos separamos, se meten en el baño incluso cuando me ducho.
- Chicas, os tengo que contar una cosa.- Marta nos empieza a asustar a Paula y a mí.
Quito el bao de la puerta de la ducha, y me quedo mirando con los ojos abiertos como platos.
Se empiezan a reír de mi cara.
- ¡Pero cuéntalo, que me estoy quedando pajarito!
- Ayer Guille, después de tanto tiempo, consiguió convencerme.
Paula tarda en pillarlo, yo mientras estallo a carcajadas tragándome todo el jabón que cae por mi cara.
- ¿Convencerte de qué?- Marta se lo explica dejándoselo todo machacadito.
Al final Paula acaba riéndose de la misma manera que yo.
¡Qué fuerte!, tanto tiempo insistiendo, que al final en el momento menos esperado...ZAS.
Por fin se ha decantado por hacerle caso al pobre chico.
Paula y yo empezamos a comentarla que debería salir con él. Marta como siempre, se niega.
Ya caerá, ya caerá.
Mientras tanto, puede fijarse en otros muchos.

5 comentarios:

  1. JAJAJA me parto, paula esto es demasiado dejo que las demas sean las protagonistas de tus historias pero poner esto.. es demasaido
    y ademas mucha imaginacion tiene la señorita paula, jaja

    ResponderEliminar
  2. como no, paula gritando para pedirselo ella
    y lo de mi historia, mucha imaginación tienes tu no?

    ResponderEliminar
  3. seguro que estas deseando que sea cierto jajajajaj

    ResponderEliminar
  4. jaja,que tia, muchos pajaros tienes tu en la cabeza

    ResponderEliminar
  5. Sisi, pero me dirás que no te ha gustado! Jajaja

    ResponderEliminar